Viajes y otras cosas

El invierno no se decide a llegar a la Costa Cálida... y yo la verdad encantada porque en los últimos fines de semana he podido disfrutar de playas casi desiertas con un agua espectacular y en esos rinconcillos especiales que todavía se pueden encontrar en por Murcia y Almería.

Cabo Cope, al que, crucemos los dedos, todavía no ha llegado el urbanismo brutal es uno de mis sitios favoritos con un montón de calas en donde se puede hacer un poquito de buceo y senderismo.
Y la costa de Almería, con Cabo de Gata que es espectacular, desde San José se llega a las generalmente abarrotadas playas del Mónsul y de los Genoveses, pero en esta época sólo andaban por allí algunos turistas extranjeros, así que un lujo.

Por Almería, han incluído varias rutas turísiticas que pasan por los pueblos del interior, una de ellas la de las pelis del oeste, la verdad es que esa zona es un completo desastre con los invernaderos y todas las fábricas asociadas... Pero es también el sitio en donde están ambientados los Spaguetti Western de Sergio Leone.
Así que como hay gente muy freaky por el mundo :D (vale...yo también puedo llegar a serlo jeje) me tocó investigar dónde estaba "Aguas Calientes".

Se trata del nombre ficticio del pueblo "mexicano" que aparece en el duelo final de la mítica película La muerte tenía un precio y resulta que se trata de "Los Albaricoques" un pueblecito en el campo almeriense, no muy lejos de San José.
Del pueblo original quedan muy pocas cosas, y aunque hay carteles con imágenes de distintas escenas, en general son un poco difíciles de identificar. Lo que sí se conserva es la era empedrada con una especie de casita al fondo y el tendido eléctrico antiguo. Además las montañas del fondo que no han cambiado... jeje. Una excursión interesante