Viajes y otras cosas

Pues ya recogiendo las últimas cosas, oooooooohhhh!! Me ha encantado mi tiempo en Sydney. Ya en España contaré mi viaje a Cairns, cómo buceé con los tiburones, descubrí un poquito la vida de mochilera y fui a un montón de sitios que recomendaba mi guía :)

Me esta encantando el Norte de Australia, la experiencia de bucear en la barrera de coral es unica!!!

En mi ultima semana en Australia :( me he convertido en una autentica backpacker (mochilera) y estoy haciendo un viaje por el norte. El domingo llegue a Hamilton Island, y desde alli a Airlie Beach en donde embarque en un velero para visitar las Whitesunday Islands. Lo mejor sin duda ver la barrera de coral, es como si estuvieras en una pecera gigante con un monton de peces de colores rodeandote. He visto hasta un par de tortugas!! La noche en el barco tambien ha merecido la pena, por fin he podido ver las estrellas en Australia que en Sydney es bastante complicado...
Y nada, de nuevo en Airlie Beach, en donde me dispongo a coger un bus que durante la noche me llevara hasta Cairns. Alli otro crucero, esta vez para bucear de verdad. Uuuuu,la verdad es que me siento todavia como si estuviera en el barco :S.

Ya ha llegado el momento de las despedidas, justo ahora que ya empezaba a sentirme un poquito como en casa toca decir adiós... me despido de mi cubículo de peli americana en la MQ uni, ya me he despedido de los compañeros, de mi supervisor...
Pero bueno, todavía me queda mi viaje al norte a la barrera de coral!! Ya he reservado el barquito para bucear (7 imersiones... no sé si voy a poder ponerme y quitarme el traje tantas veces jeje) y otro para recorrer en plan más tranquilo las whitesunday island.

Hoy sin pensar mucho he reservado los vuelos para irme en mi última semana al norte, a Cairns y a Whitesunday coast, son sólo 6 días, pero bueno... La verdad es que ahora mismo tengo la sensación de que me quedan muchas cosas por hacer y por ver aquí, y que me falta tiempo!! Este finde espero poder ir a Royal National Park, la semana que viene otro congreso, con otra exposición (odio las exposiciones en inglés), y la otra semana mi viaje al norte... y se acabó!!

He sobrevivido a mi presentación en inglés!! A pesar de los nervios, la cosa no fue mal, hasta conseguí entender las preguntas :)

En cuanto a Bribane, no sé, supongo que Sydney ha puesto el listón muy alto y el sábado que era el día que tenía para hacer turismo el tiempo no acompañaba mucho. Estuve paseando por el centro, que conserva algunos de los edificios originales del siglo XIX cuando la ciudad fue fundada como una colonia para trasladar a los presos más peligrosos. También cogí el ferry para poder disfrutar de las vistas de la ciudad, y ya de paso para comprobar si era verdad lo que me habían contado a cerca de que los tiburones se adentran en el río... la verdad es que no vi ninguno y tampoco estaba dispuesta a meter la mano en el agua...

My first pressentation in English!! Este finde lo voy a pasar en Brisbane, una ciudad al norte de Sydney, capital del estado de Queensland (donde está la Gran Barrera de Coral). Y es precisamente en Queensland University donde se celebra el domingo un workshop en que haré una pequeña presentación relacionada con la biomedicina, las ontologías y esas cosas que cuesta tanto explicar cuando la gente te pregunta a qué te dedicas...

El sábado pasado por fin cogí el tren en dirección a las Montañas azules, en concreto a Katoomba un pueblo en el corazón del parque natural.No muy lejos de allí se encuentran las Tres Hermanas, que según la leyenda fueron pretendidas por tres hermanos de una tribu rival. Al comenzar una guerra entre ambas tribus, un brujo las convirtió en roca para protegerlas pero el brujo murió antes de poder deshacer el hechizo. Así que allí están las tres rocas, posiblemente lo más famoso-turístico de las Blue Mountains y mi punto de partida para a iniciar un bushwalking (un sendero, vamos).
Es realmente impresionate contemplar el inmeso bosque que se extiende hasta donde alcanza la vista, y que ciertamente, dependiendo de la luz, parece azul.

Esto según leí se debe a que los eucaliptos desprenden un aceite que causa este efecto.
Así que a pesar del viento-lluvia-frio-sol y después granizo, estaba deseando empezar mi ruta. Al principio anduve al borde de los acantilados, desde allí había unas vistas muy bonitas y ya se podía comprobar que no todo eran eucaliptos en el bosque, en torno a las cascadas y arroyuelos crecía una vegetación muy tropical. Bajando un poco llegué hasta Leura Falls, y poco a poco fui descendiendo por empinados tramos de escalera hasta hasta adentrarme en el bosque de árboles gigantes y pájaros extraños.
Después de casi 5 horas andando por sitios espectaculares y con los pantalones mojados por la lluvia llegué hasta una antigua mina, de nuevo un sitio turístico lleno
de japoneses con sus cámaras de fotos. Allí cogí el tren con la mayor inclinación del mundo construido en su origen para transportar a los mineros, que me llevó directamente hasta la civilización, en concreto a una tienda gigante de souvenirs.

Sydney está rodeada de parques naturales, y en la misma City hay varios jardines muy bonitos, cuando llegué me sorprendió la cantidad y variedad de vegetación (suele pasar cuando eres de Murcia...) pero ahora todo tiene una explicación: No para de llover.
Este finde la lluvia se ha vuelto a interponer entre mis planes de hacer turismo, en este caso de visitar las Blue Mountains, una excursión que tengo pendiente desde hace ya tiempo, y yo. Así que nada, aprovechando que vivo en una zona universitaria (Ultimo-Glebe) me dedico a visitar mercadillos, comer cosas raras y entrar a tiendas de ropa extraña, libros usados y cosas de segunda mano.
Y por supuesto en Bondi siempre hay alguna fiesta en la que se puedan beber cubatas en tazas de desayuno y experimentar una vida totalmente irreal, como sacada de una serie de televisión para adolescentes...un ratito es divertido.

El domingo tempranito cogí de nuevo el ferry hacia Manly, esta vez con el objetivo de descubrir el fondo marino de Sydney con un pequeño club de buceo que hay en la uni.

Tras los preparativos de rigor iniciamos la inmersión en Shelly Beach, una cala pequeñita cerca de Manly. Primera diferencia con respecto al Mediterráneo: las algas, nada de poseidonia, segunda diferencia los peces son realmente enormes
(también hay algunos pequeñísimos pero esos los vi después :)). A los 5 min de estar bajo el agua vi un groper, un pez azul super grande, que debía estar acostumbrado a los buzos porque no era nada asustadizo, al parecer son de los más normal en Sydney pero a mi me llamó un montón la atención.
Otro de los peces realmente impresionante fue un Spotted Wobbegong, que resultó ser un tiburón!!De eso me enteré cuando ya estábamos fuera del agua, lo que explica que el instructor se mantuviera a cierta distancia...Pero vamos a ver esas cosas se avisan!
Y después del buceo descubrí un deporte que me encantó: el Bodyboarding!! se trata de deslizarte por las olas tumbado en una tabla. Hacía un día perfecto en la playa de Mainly, con unas olas no muy grandes (suficientes para mi). La idea es "surfear" por la ola, pero por el momento lo único que sé hacer pillar la ola y dejarme arrastrar hasta la orilla. Es super divertido!! aunque todavía tengo agujetas...

Por fin Sábado, y otra vez lloviendo! Hay un dicho por aquí de no recuerdo qué ciudad pero que sin duda se puede aplicar a Sydney, y es que en un día se pueden tener las 4 estaciones. Lo peor de todo es que lo lunes suele hacer un sol radiante, al igual que los viernes, y luego los sábados y domingos nublado o lloviendo!
Así que hoy tenía previsto ir a la playa, pero habrá que cambiar de planes...
Últimamente el turismo que hago suele ser gastronómico, aprovechando que mi compañero de casa conoce un montón de sitios,ya he probado un brasileño, un mejicano, un japonés (qué show con los palillos!), un coreano, thailandeses, indios... uf un montón.
En Sydney cada día de la semana es más barata algún tipo de comida y bebida, por ejemplo los miércoles puedes comer burritos por 3$ y beber tequila también por 3$.
Uno de mis sitios favoritos, para tomar algo, es el Opera bar, en donde puedes disfrutar de un mojitos buenísimos y unas vistas realmente impresionantes.

Aquí estoy con Alex y Stephen, mis housemates, que son un encanto.

Acabo de apostar two dollars por Ice Chariot! Hoy y mañana es la Melbourne Cup, una carrera de caballos que es todo un acontecimiento en Australia.
Como aquí cualquier excusa es buena para apostar han puesto en la sala del té una pantalla para seguir las carreras y han montado una pequeña casa de apuestas, por dos dólares te dan un número y ese es tu caballo. Ahora sólo necesito un sombrero extravagante...

http://xkcd.com/77/

En el mes de octubre, con la llegada de la primavera se celebran en Sydney varios festivales temáticos, y todos los fines de semana en la zona de Circular Quay, The Rocks y Darling Harbor se puede hacer algo interesante. Este finde era el Beer festival, en el que se podían probar un montón de cervezas australianas. Sin duda mi favorita sigue siendo la Coopers green, no sé si porque ya me he acostumbrado, pero por probar...también fue interesante una que sabía a mango.
Las fiestas latinas también tienen bastante éxito, y es que a los australianos en general les gusta España, la salsa, el regueton (no sé cómo se escribe :)) y todos los tópicos como las tapas, la paella (jeje, a ver donde consigo una sartén grande porque ya me he comprometido a hacer varias...) y si alguna vez han visitado España, la mayoría de ellos han estado en Barcelona (very nice, cute, beautiful, impressive, amazing...)yo por supuesto les hablo de las maravillas de Murcia ;) y ya de paso difundo el español enseñando algunas palabritas.
Y como todos los fines de semana la bbq de rigor, esta vez con la gente de la uni, en una casa que uno de los profesores tiene en una isla en le norte de Sydney que se llama Scotland island, las playas del norte de Sydney son muy diferentes porque están rodeadas completamente de vegetación y la franja de arena no es muy grande.
La isla que está muy cerca de la costa, es un bosque super frondoso de eucaliptos entre los que están las casas de madera, es un sitio muy bonito la verdad.

Desaforturnadamente los koalas y los canguros no corretean por las calles de Sydney, y verlos en su hábitat natural es muy complicado, así que el sábado pasado me decidí por visitar Taronga Zoo que ya me habían recomendado varias personas. El ferry es una de las opciones para ir y como me gustó la experiencia del finde anterior pues embarqué de nuevo.

El zoo ocupa toda una colina con un montón de vegetación y desde allí hay unas vistas muy bonitas a la city. Había animales de todo el mundo, pero a mi lo que más me interesaba era ver los australianos!! Así que nada más bajar del telecabina en el que podías subir para llegar hasta la cima de la colina, allí estaban comiendo eucalipto, los koalas!! Son de verdad super bonitos, sin duda fue lo que más me gustó (aunque huelen un poco mal). Los canguros que vi eran bastante pequeños a parte de inactivos, nada de saltar ni boxear ni nada, la verdad es que parecían un poco tristes, bueno en general todos los animales.
El panda rojo que nunca había visto en directo es también muy bonito. Luego por supuesto había una colección enorme de reptiles de todo el mundo entre ellos los cocodrilos, un dragón de comodo gigante, las serpientes venenosas... En fin fue interesante.

Ya es viernes de nuevo, y entre unas cosas y otras no he escrito nada desde hace casi un par de semanas.
Ya estamos en plena primavera, y a excepción de algunos días lluviososs, el resto, más que trabajar apetece ir a conocer nuevos lugares o a perderse en alguno de los parques naturales por los que pasamos de camino a la universidad, de hecho la propia universidad está justo al lado de uno (por el momento sigo yendo a trabajar jeje).

Con el buen tiempo llegan las barbacoas (bbq o barbies), desde las tranquilitas que preparamos en la terraza de casa hasta las públicas que se preparan en la calle con un montón de gente. En muchos de los parques de Sydney hay barbacoas públicas, son eléctricas (no de carbón como yo pensaba :)) y nada puedes llevar allí tus cosas y cocinarlas.
El domingo pasado hice una de las excursiones más bonitas que hay por los alrededores de Sydney que es ir en ferry hasta Mainly Beach (las fotos que he puesto son de esa excursión). La terminal de los ferrys está justo al lado de la ópera, así que sales desde allí y vas recorriendo la bahía hasta Mainly, desde el ferry hay una nueva perspectiva de la ciudad.
Una vez Mainly hice un sendero que atravesaba el National Harbour Park, en el que un tramo discurría al borde de los acantilados y otro tramo pasaba por varías calas que muy bonitas.
El agua está todavía congelada así que no me animé a bañarme.

Hoy es el Labour day en Australia, que como en España se celebra no trabajando, así que este finde ha tenido 3 días. Pero a pesar de eso no he podido hacer mucho turismo porque ha estado lloviendo de manera intermitente. Hoy por fin, aburrida de estar en casa y de ver tiendas, he decidido salir de excursión. Mi idea inicial era visitar el Royal National Park, un parque natural que se encuetra al sur de Sydney, y sobre el que ya había recopilado bastante información. Pero al llegar a la estación, el tren que iba en dirección al parque estaba averiado y había un buen retraso, así que allí mismo he cambiado de parque natural y me he ido hacía el norte, hacia Ku-ring-gai Chase National Park.
El problema es que no tenía muy claro cuál era la parada de tren exacta, así que he acabado en Berowra, un sitio con unas casitas como las de las pelis americanas así de madera y cada una con su jardín, finalmente he visto un sendero que se adentraba en el bosque de eucaliptos (como no) bajando por una montaña que llegaba hasta lo que creo que era una bahía. He hecho un tramo, pero entre que a ratos llovía a ratos salía el sol, y que no tenía muy claro que fuera buena idea adentrame en un bosque sola, he acabado haciendo mi parte favorita del senderismo: sentarme en una roca a comerme los bocatas. A ver si hay suerte y el finde que viene puedo ir a la playa!!

Cuando estás en un país distinto al tuyo, creo que es inevitable fijarte en pequeños detalles que no tienen mayor importancia pero que son diferentes. Algunas de las cosas que me han llamado la atención son:
En los pasos de peatones los semáforos tienen pulsador para que se ponga en verde, mientras esperas emiten un pitido intermitente, y cuando cambian de color hacen un ruido super estridente. Cuando comenté que en España los semáforos suenan como un pájaro, me dijeron que aquí también, pero como un pájaro australiano... y creo que iba en serio jeje.(Como hay mucho friki por el mundo lo he encontrado en Youtube)
Y esto me lleva a la siguiente apreciación, los pájaros son muy ruidosos, sobre todo las cacatúas. En especial una que frecuenta la terraza de enfrente de mi habitación...
El Burguer King se llama Hungry Jack
A veces dudo si estoy en Sydney o en otro país asiático
La cerveza Foster se fabrica sólo para la importación.
A la gente le encanta ir en chanclas pero sobre todo les encanta ir descalzos por la vida, hasta en la uni. Y es que aqui todo esta enmoquetado.
Las bolsas de plástico están mal vistas, en su lugar la gente usa para todo unas bolsas de tela o fieltro.
El consumismo es la premisa de la ciudad, vayas donde vayas siempre verás un mercadillo, una tienda, pero sobre todo un centro comercial. Es demasiado hasta para mi!! Por ejemplo en las profundidades del jardín bontánico se pueden comprar plantas!!
En las fotos de la Opera House se aprecia una textura extraña, y siempre me había preguntado a qué se debía, resulta que está cubierta de azulejos blancos y por eso brilla cuando le da el sol.
Hay restaurantes de cualquier parte del mundo.
Beben leche fresca.
No hay metro!! Sólo tren y monorrail, y por cierto el transporte público es bastante caro.
Hay tarjetas de felicitación para todo lo que se pueda celebrar en esta vida.
...
Y estas son algunas de las cosas en las que me he ido fijando estos días, interesantes eh? jeje
Si alguien tiene alguna duda existencial en cuanto al life style de Sydney, pues nada que me la diga y ya investigaré...

Esto puede parecer un poco friki, y de hecho lo es, pero no he podido resistirme a escribir un post desde un Macbook air en la Apple Store gigante de St George, jeje

Aprovechando el finde he hecho un poco de turismo por Sydney. El sábado fui a visitar a un amigo hasta Bondi, la famosa playa en donde el surf, la música callejera y las barbacoas son los elementos esenciales de este nada estresante estilo de vida. Aunque está sólo a unos km de la City el ambiente es totalmente diferente.Y por fin pude hablar un rato español!!
Hoy, tras mirar la guía un rato, me he decidido por The Rocks, el lugar en donde desembarcaron los primeros ingleses que llegaron a la ciudad (los tripulantes de la First Fleet) y en donde se encontraban los barracones de los presos. Aquí los edificios "históricos" como son muy pocos, les dan mucha importancia... pero bueno.

La verdad es que es una zona muy bonita, pasando por debajo del Harbour bridge se llega hasta un mercadillo de artesanía, y desde allí hasta el lugar que tiene las mejores vistas de la Ópera House, del puente y de la bahía, que hoy estaba muy animada con un montón de veleros. No tengo muy buenas fotos porque me he olvidado la cámara en casa ¡Menuda turista estoy hecha! así que con el móvil he hecho unas cuantas...

Bordeando la bahía me he acercado hasta la ópera y desde allí me he adentrado en el enorme (pero enorme) jardín bontánico, ya me advirtieron ayer y de hecho puede comprobar en el brazo de una chica, lo peligrosas que son las picaduras de algunas arañas que se encuentran por los parques, así que aunque he estado leyendo un rato a la sombra de un árbol gigantesco finalmente he decidido que lo mejor sería pasear. A parte de los árboles, arbustos, florecitas y palmeras me he encontrado como con unas 4 bodas.

Esta mañana me he despertado y vaya ¡ya estoy aquí una semana!, muchas veces vemos pasar las semanas una tras otra sin muchos cambios… pero madre mía! Esta semana ha sido muy intensa para mi, he vivido un montón de cosas.
En la universidad sigo conociendo gente nueva, he progresado un poco con el idioma, jeje, a la hora de la comida ya me entero de cuál es el tema general de la conversación, vamos que pillo 3 ó 4 palabras jeje… Mi supervisor sigue de vacaciones una semana más, así que…
El miércoles por la tarde fui paseando desde casa hasta el Opera House, pasando por Paddy’s Market, China Town, la Sydney Tower, Hyde Park… cuando llegué estaba anocheciendo y es realmente impresionante, sugestiona muchísimo estar ahí en el “símbolo” de Sydney con toda la bahía iluminada y el Sydney Harbor Bridge (el puente que sale en las imágenes de fin de año... y por el que paso todos los días para ir a la uni!!)
En el tiempo que llevo aquí me están llamando la atención varias cosas, estoy haciendo una pequeña lista con ellas que ya pondré en el blog pero de momento comento una que viví anoche y que está relacionada con la cerveza, y es que aquí nadie bebe Foster, la “típica cerveza australiana” resulta que se fabrica fundamentalmente para la exportación y a la gente no le gusta mucho. Sin embargo la que bebe mucho la gente es , ummm… jeje no recuerdo el nombre no sé qué green… intentaré recordarlo para la próxima…jeje, estaba bastante buena…

Esta semana ya he empeza a trabajar, bueno relativamente, porque mi supervisor aquí está de vacaciones y regresa la semana que viene. El lunes estuve en el seminario del grupo, que es todos los lunes, y allí ya me presenté y conocí a mis compañeros. Nada más llegar la secretaria me explicó amablemente el funcionamiento de todo y me dio la llave, la tarjeta de entrada y varias contraseñas... lo de la seguridad es un rollo y más para mi que con lo despistada que soy seguro que más de una vez me quedo fuera del laboratorio...(la puerta se cierra cada vez que sales).
Mi sitio de trabajo es un laboratorio grande dividido en cubículos de esos como los de las pelis americanas y lo que menos me gusta es que no tiene ventanas...
El campus tiene un montón de cesped y hasta un lago artificial, que al parecer es un delirio de grandeza de un decano de por aquí.
El grupo en el que estoy es bastante activo, ayer estuve en un "reading group" que consiste en irse a un bar a discutir sobre un paper que todo el mundo se ha tenido que leer al mismo tiempo que se toman unas cervecitas. En fin yo me apunto a todo, jeje.
En cuanto al inglés, bueno, ahí voy, la gente es bastante paciente conmigo, pero cuando hablan entre ellos no entiendo na de na.
De Sydney no he podido conocer nada más, pero en el camino de vuelta de la uni hay unas vistas espectaculares de la ciudad iluminada, con los rascacielos, el puente, la ópera... una pasada.

El sábado a las 5.10 hora local aterricé por fin en Sydney. Un taxi me trajo directamente hasta la casa donde estoy instalada y que comparto con un chico y una chica. Tras descanasar un rato (no mucho porque estaba deseando salir a la calle a conocer algo de la ciudad) hice la compra en un centro comercial que hay al lado de mi casa, una experiencia divertida. Pero finalmente como estaba agotada y aquí oscurece muy temprano decidí esperar a hoy para visitar alguno de los lugares que recomienda mi guía :-). Me he decidido por la zona de Darling Harbour, después de que mi compañero de piso me advirtiera que hoy había una maratón por toda la zona del Opera House.
Y he descubierto que me encanta Sydney!!, desde esta zona hay unas vistas espectaculares a la City con todos los rascacielos y la Sydeney Tower. Todo da la impresión de una ciudad moderna y comercial pero con el encanto de estar abierta la bahía, hay un montón de fuentes de diseños originales junto con palmeras y otros árboles. Hoy había un festival Brasileño con música en directo, así que me he quedado por allí y he comido algo en los puestecitos de comida que había.
Después he visitado el Chinese Garden, un jardín muy bonito que contrasta con los edificios modernos que hay alrededor.
Siguiendo el paseo he estado en Paddy's Market un mercado muy antiguo repleto de puestos de cualquier cosa que puedas imaginar. Ni siquiera yo he podido verlo entero!!!
Y nada, como todavía no me he acustumbrado del todo al horario después de esto he dado por terminada la visita...

Bueno, pues en un ratito saldré rumbo a Australia, tengo el visado, la maleta (casi), el passport, he comprobado para dónde gira el agua del lavabo, tengo un sitio en el que vivir, un sitio en el que trabajar... y un montón de horas de viaje por delante.
Muchas gracias a todos por los ánimos y por los regalos y por todo!!

Con lo liada que he estado estos días al final no he seguido contando el viaje del verano -¡qué lejano lo veo ya!- pero bueno, haré un resumen de lo que vimos por Sicilia que fue mucho y muy variado.
A ver pues como decía nos establecimos en Menfi, que es un pueblecito costero al suroeste de la isla.
Los primeros dos días los pasamos en plan tranqui, en las playas cercanas, muy bonitas por cierto y en el pueblo de aquí para allá probando la comida típia, o sea, pizzas, pasta y por supuesto mega-helados. Lo que me llamó la atención desde el principio fue que la costa apenas estaba urbanizada, ni hoteles ni nada, entonces cuando acababa el pueblo los campos de vides llegaban prácticamente hasta la orilla de la playa. Esa fue una de las cosas que más me gustó de Sicilia.
El día 14 lo pasamos organizando una barbacoa que se celebra en la playa, que empieza por la tarde y termina a la mañana siguiente, y en donde tooooodo el mundo enciende una hoguera en la playa,come bocadillos de salchicha con cebolla asada y se baña a las 12 de la noche para pedir un deseo. La bebida tampoco falta, eso sí, el hielo es otra historia, en Sicilia es misión imposible comprar cubitos, y en los bares ven tan normal servite las copas sin hielo cuando se les acaba.

Scala dei Turchi
Comenzamos ya a movernos por la isla, nuestra primera visita fue este curioso acantilado de color blanquísimo que recordaba al paisaje lunar o a una tarta de nata, depende a quién le preguntes ;-).

Después, guía del Trotamundos en mano, fuimos a parar a Caltabellota, un pueblo con un montón de iglesias, en la cima de una montaña y al que se llegaba por una carretera con unas 1000 curvas.

Etna y Taormina
El Etna se divisa a kilómetros y kilómetros de distancia, pero no penséis que es fácil llegar, porque encontrar la carretera de ascenso tiene su aquel.
Con el coche sólo se puede llegar a una cierta altura, depués hay varias opciones: subir a pie (podríamos estar todavía subiendo) o subir en telecabina hasta una cierta altura, luego un camión te lleva hasta otra zona más alta y finalmente a pie, acompañado de un guía puedes acercarte hasta el cráter principal. Nosostros nos decidimos por el telecabina y ya desde allí sólo los valientes ;-) subimos un buen tramo a pie. Es muy llamativo el contraste de colores, las piedrecitas volcánicas negras con el azul del cielo y las nubes que se quedaban por debajo de nosotros.
Además es muy divertido, porque al bajar es igual que una duna de arena, te vas hundiendo un poco y puedes bajar corriendo, eso sí todavía no he conseguido quitarle el polvo negro a los zapatos.
Desde allí en una carrera al estilo siciliano, intentamos llegar al teatro de Taormina que desafortunadamente estaba ya cerrado. Así que nos dimos un paseo por el pueblo, que tenía mucho encanto, y que fue uno de los que más nos gustó a todos.

Pero el día no acaba ahí, sobre la marcha habíamos reservado un albergue en Catania,
creo que es el sitio más cutre en donde he dormido nunca, por suerte en la terraza de abajo preparaban uns mojitos buenísimos (con hielo), así que al final no importó mucho el sitio.

Catania y Siracusa.

A la mañana siguiente deambulamos un rato por Catania, me causó mala impresión en general, edificios destartalados y suciedad.
Siracusa sin embargo es una ciudad preciosa, sobre todo la parte de Ortigia, la isla donde tuvo su origen esta importante ciudad griega.
Aquí ya sí pudimos visitar el teatro greco-romano que se conserva muy bien junto con una gruta en la roca que se llama la oreja de Dionisio.
Después de un rato buscando alojamiento, e intentando no repetir la experiencia de la noche anterior, encontramos una especie de break&breakfast que estaba muy bien, era una casa antigua situada en una calle muy bonita que desembocaba en el mar.
Esa tarde estuvimos recorriendo Siracusa que sin duda fue la ciudad siciliana que más me gustó. Los edificios estaban mejor cuidados y muchos de ellos habían sido restaurados. La catedral de Siracusa es impresionante, está construída sobre un templo griego del que se conservan todas las columnas. La cena de esa noche estuvo genial, fuimos a una espaguetería que recomendaba la guía (como no), la especialidad eran los spaghetti frutti di mare, deliciosos.

Noto y Agrigento
Buena parte del día siguiente la pasamos en el coche, y es que Sicilia no se caracteriza precisamente por tener una buena red de carreteras.
Dedicamos un rato a ver Noto, un pueblo que es Patrimonio de la Humanidad, la calle principal es muy bonita (se nota el presupuesto), allí compramos un instrumento típico de Sicilia que se llama Marranzano, es gracioso, pero vamos que yo no sé tocarlo ni de coña.
Y ya por la tarde llegamos al Valle de los templos en Agrigento, a pesar de que la ciudad nueva consiste un un muro de bloques de pisos, bastante feos por cierto, la situación privilegiada del yacimiento en lo alto de una colina ha propiciado que los templos sigan preservando su encanto. Aquí se encuentra uno de los templos mejor conservado del mundo griego, el templo de la Concordia o de los Dioscuros, su buen estado de conservación se debe a que fue reutilizado como iglesia durante siglos.

Relax en Menfi
Después del recorrido turístico concentrado, tocaba un poco de relax, fuimos a una playa cercana a Menfi, muy chula, pero eso sí, el hielo que no te ponen en los bares se lo habían echado al agua, porque estaba realmente congelada. A pesar de eso estuvimos buceando un ratito.

Palermo y la capital de la Mafia
No podíamos irnos de Sicilia sin visitar Palermo. Estuvimos en la Capella Palatina, una iglesia bizantina con unos mosaicos impresionantes.
Dimos un paseo por Palermo, en donde de nuevo comprobamos la dejadez característica de las grandes ciudades sicilianas, a pesar de que hay edificios bonitos, están en general mal cuidados. No obstante, Palermo tiene su encanto. Anduvimos un rato por un mercadillo en donde probamos el intestino grueso asado, sí suena asqueroso y es asqueroso.

El Padrino es uno de mis libros favoritos, y las pelis también me gustaron mucho, así que me hacía mucha ilusión ver Corleone, vamos que no tiene nada, pero me hacía ilusión. Así que ya casi anocheciendo llegamos a este pueblecito mafioso para hacernos la tradicional foto debajo del cartelito.

Favignana
Favignana es una isla del archipiélago de las Egadi a la que se llega mediante un ferry desde Trapani.
Como es muy turística nos fue imposible alquilar algún medio de transporte, así que fuimos en una especie de taxi hasta unas playas cristalinas y llenas de gente.
Y desde allí hasta un club de buceo para hacer una inmersión, fue sin duda la inmersión más bonita de las que he hecho hasta ahora.
Y fin de nuestra estancia en Sicilia, esa madrugada llegamos al aeropuerto de Palermo y despegamos rumbo a Roma.

Uff, pensaba que no iba terminar nunca de contarlo... jeje

Se me está acumulando el trabajo en el blog, aún no he terminado de contar el viaje del verano y la semana que viene ya me voy a Sydney.
Además esta semana he estado unos días en Madrid en el congreso de la SEPLN (Sociedad Española para el Procesamiento del Lenguaje Natural) que ha tenido lugar en la Universidad Carlos III.
Ha sido interesante porque nos ha dado la oportunidad de conocer a otros grupos de investigación afines al nuestro, además de reencontrarnos con la gente que ya conocíamos.
La parte turística del curso consistió en una visita teatralizada por el Madrid de los Austrias, en la que a medida que andábamos nos encontrábamos con algunos personajes de la obra de El Capitán Alatriste que interpretaban una pequeña escena cómica.
La cena del curso fue en un restaurante bastante extravagante la Capilla de la Bolsa, en el que unos tenores iban cantando ópera y zarzuela entre la gente (no todo el rato eh), además había una mezcla de estilos decorativos muy curiosa. La tarta de chocolate estaba buenísima.
La parte de turismo "extraoficial" por los bares de Madrid, también estuvo muy divertida ;-)
Ah, qué se me olvidaba mi foto amazing!! jeje